Dare mighty things

Secuencia de aterrizaje de la Perseverance en el cráter Jezero (NASA/JPL)
El lema del JPL cifrado en el paracaidas que ayudó a posarse al rover en Jezero (NASA/JPL)

Atrévete con cosas poderosas,… con ese mensaje descendía el rover Perseverance hacia su hogar los próximos años. Un mensaje que a muchos se nos había olvidado ya, totalmente sumergidos en una vorágine de pesimismo, de malas noticias, de continuas decepciones,… se nos había olvidado lo importante.

Parte final del descenso de Percy en Marte (NASA/JPL)

El último ejemplo de este lema lo veíamos hace unos días en el vuelo de prueba de la Starship de SpaceX. Un prototipo totalmente novedoso que en su versión final será capaz de llevarnos aterrizar en cualquier lugar del sistema solar, con una capacidad de transportar cargas y personas nunca antes conocida.

La SN10 aterrizando en las instalaciones de SpaceX en Boca Chica (SpaceX)
Otra toma del descenso de la SN10 (Caspar/_Stanley Creative)

La ciencia nos está permitiendo contemplar un antiguo delta marciano, donde quizás la vida tuvo una oportunidad hace 2.500 millones de años. Nos está permitiendo observar asombrosas formaciones sedimentarias en el cráter Gale, donde Curiosity continua ascendiendo por las faldas del monte Sharp. Nos está ayudando a combatir la peor pandemia en más de un siglo gracias al desarrollo de vacunas efectivas y seguras en un tiempo récord.

Primera panorámica enviada por el rover Perseverance desde el cráter Jezero (NASA/JPL)
Un paseo virtual por el Monte Mercou desde los ojos de Curiosity (NASA/JPL/Mattias Malmer)
Paseo virtual por la zona de aterrizaje del rover Perseverance a partir de 240 imágenes (NASA/JPL/VR2Planets)

Espero y deseo que aún quede alguien al otro lado de la pantalla que se haya emocionado al ver alejarse el skycrane del rover una vez cumplido su cometido, que se haya preguntado sobre el posible origen volcánico de algunas de las rocas donde se ha posado Perseverance o que sólo se haya maravillado al ver cómo un cohete es capaz de descender planeando y en el último momento encender y apagar sus motores, casi con voluntad propia y posarse (más o menos con éxito) sobre la pista de Boca Chica.

Esto solo acaba de comenzar, sería una pena que lo echáramos todo a perder…

Vuelo de prueba de la SN8 a la que se le ha añadido digitalmente el propulsor SuperHeavy (SpaceX/Pockn)

Probable slope (agua en superficie) captado por el rover Curiosity.

Créditos: NASA/JPL-Caltech/MSSS/j. Roger

Créditos: NASA/JPL-Caltech/MSSS/j. Roger

Ya lo avisaba Jacint Roger en su cuenta de twitter hace 2 días. Escondido dentro de un enorme panorama tomado por la Mast Camera en Sol 2617 surgía la sorpresa.

Lo que la sonda Mars Orbiter ha fotografiado en diversas localizaciones del planeta rojo con anterioridad podía estar delante del rover Curiosity en estos mismos momentos. Un RSL (Recurring Slope Linae), probable agua líquida mezclada con sales que disminuiría el punto de congelación del agua pura y que permitiría su aparición en la superficie marciana.

De ser un verdadero slope (y no un simple corrimiento de tierras) el rover debería alejarse lo más posible de la zona para evitar cualquier probable contaminación biológica, algo especificado en los diversos protocolos firmados por la comunidad científica.

El slope no está en la ruta del rover, en unos pocos soles desaparecerá del alcance de las cámaras… es una zona que no debemos contaminar con microorganismos terrestres que hayan podido sobrevivir al largo viaje y a la estancia del rover en la superficie marciana (ya sabemos lo que pasa cada vez que subestimamos la capacidad de supervivencia la vida),… pero quizás tardemos mucho tiempo en volver a tener uno tan cerca,… ¿tan perjudicial sería monitorizar la zona unos cuántos días? ¿unas cuántas mediciones a una distancia suficientemente segura?…

Quizás nos mueve la inquietud de ver agua fluyendo por la árida superficie marciana, lo más sensato es dejar el estudio de esos fenómenos a sondas futuras con un grado de esterilización que el Curiosity no posee. Pero no podemos evitar que un escalofrío nos recorra la piel…

La materia de la que están hechos los sueños

No puedo vivir sin soñar despierto, me pasa desde pequeño, este problema ha condicionado varios aspectos de mi vida y es un serio handicap para conseguir metas que requieren concentración y constancia.

Mañana a las 19:30h (horario peninsular) está previsto que haga su vuelo inaugural el cohete más potente en activo, el Falcon Heavy.

Su dueño, Elon Musk, acaba de subir a una red social el video que encabeza este pequeño apunte del blog,… y es glorioso,… 70 metros de última tecnología, propulsados por 27 motores Merlin capaces de colocar 57 toneladas de carga en órbita,… y en su interior el coche de Elon, un Tesla Roadster descapotable con un maniquí enfundado en uno de los trajes espaciales que llevarán los futuros tripulantes de la cápsula Dragon…

… Y de fondo sonando el «Space Oddity» de Bowie…

Mis ojos están cansados de ver sufrimiento cada guardia, mis palabras cada vez tienen menos sentido,… mi alma necesita de estas cosas, necesita ver ese pequeño Tesla dirigirse hacia una órbita heliocéntrica que, con suerte, lo acercará al planeta rojo en los próximos años.

Quiero verlo alejarse con la música de Bowie de fondo, aunque jamás pisemos Marte, dejadme soñar,…

(lo que sonará dentro del Tesla mientras inicia su viaje hacia la inmortalidad)

Un paseo por Yellowknife Bay, Cráter Gale, Marte. 

Dicen que ya hay toda una generación de jóvenes que no sabe lo que es no tener imágenes nuevas de Marte casi a diario. 

Nos hemos acostumbrado a ver los paisajes marcianos como algo cotidiano, algunos han perdido la capacidad de asombrarse ante la hermosa desolación marciana después de tantos años, yo no. 

El vídeo que abre la entrada es una gozada, está realizado a partir de una imagen tomada por la Mastcam del Curiosity en Sol 137, y es un verdadero paseo por Yellowknife Bay, uno de los primeros sitios que visitó el rover dentro del cráter Gale

No sé si teneis gafas VR, arriba a la derecha el vídeo ofrece una opción para este tipo de visualización,… quizás se ha quedado buena mañana para dar un paseo por Marte,…

Credit: NASA, JPL/Caltech. Blender Plugin: Rob Haarsma. Music: Jan Jelinek/Do Dekor

Bonus: sólo para los asiduos a la página 😉 otro vídeo de inmersión, esta vez atravesando el Maria Pass, con el Monte Sharp al fondo. 

Había vida en la Tierra hace 3.770 millones de años. Acercándonos a LUCA

Túbulos producidos por microorganismos en rocas sedimentarias de Quebec (Nature)


Acaba de salir en Nature una nueva investigación que retrasa, aún más, la edad en la que apareció la vida en nuestro planeta. 

Un equipo internacional de científicos han encontrado unos pequeños filamentos y tubos de hematita en formaciones de cuarzo creados por bacterias que vivían en el hierro. El sitio donde se han encontrado los restos más antiguos de vida de los que tenemos conocimiento es el cinturón de Nuvvuagittuq, un lugar situado en Quebec (Canadá), un emplazamiento de culto entre los geólogos ya que está formado por rocas sedimentarias datadas entre 3.770 y 4.300 millones de años, una zona que pertenecía a un sistema de fuentes hidrotermales oceánicas repleto de hierro. 

Restos de oxidación de materia orgánica hallados por los investigadores en la zona de Nuvvuagittuq (Nature)


La Tierra se formó hace 4.600 millones de años, estamos hablando de microorganismos que dejan su huella en rocas que aparecen apenas 300 millones de años después. Si tenemos en cuenta el tiempo que le costó a nuestro planeta enfriarse mínimamente, la disminución de impactos en su superficie proveniente de la época conocida como el «Gran Bombardeo», la aparición de algo parecido a una atmósfera primigenia,… estamos hablando, en tiempos geológicos, de una aparición casi instantánea de la vida en nuestro mundo, la existencia de vida en el primer momento que fisica, química y biológicamente pudo ser,… algo que da mucho que pensar. 

De ser cierto este temprano despertar de la vida sólo estamos delante de dos hipótesis, o la vida tuvo un génesis fuera de nuestro planeta y de alguna manera llegó (y arraigó) en un planeta recién formado pero con las características suficientes para permitir su continuidad, o la vida surge a la primera oportunidad que tiene…

En la primera opción hablamos de panspermia, un tránsito de vida desde un cercano mundo que ha tenido una génesis primaria o no, hablamos de hace 4.000 millones de años, con un Marte en el máximo punto de su habitabilidad, con océanos de agua líquida en superficie y temperaturas más templadas. 

En la segunda opción hablamos de química orgánica cuya evolución natural tiende a formar vida casi instantáneamente, unas temperaturas no demasiado extremas, nutrientes, una fuente de calor como pudieron ser las fuentes hidrotermales oceánicas, una mínima protección con una atmósfera y un campo magnético generado por un núcleo metálico,… 

Las consecuencias pueden ser inimaginables, vida microscópica en incontables localizaciones a lo largo de nuestro sistema solar y nuestra galaxia. Si  encontramos estos mismos fósiles en estratos marcianos de hace 4.000 millones de años tendremos una respuesta de donde venimos, al menos en un primer paso. 

La vida compleja, eucariota, organizada, diversificada,… eso es otro tema, le costó mucho aparecer, requirió demasiados factores para aparecer, quizás demasiados,.. 

Fuente: Nature

Actualización: cada vez nos vamos acercando a LUCA cada vez más, quizás cuando estemos a punto de tocarlo con los dedos nos demos cuenta que nunca estuvo aquí. 

Impresionante recreación del Curiosity en Marte

Son 2 minutos y 20 segundos que Sean Doran acaba de colgar en Flickr. Se han combinado datos de la cámara Mastcam del propio rover y la HiRISE de la MRO. 

Es una recreación impresionante del viaje del Curiosity a través del cráter Gale. Es como estar allí. 

Fuente: Twitter Emily Lakdawalla

Biomarcadores, indicios de habitabilidad… ¿no hay vida fuera de nuestro planeta o no sabemos buscarla?

Una bacteria oxidadora del azufre de hace 2.500 millones de años, mucho antes de que la atmósfera fuera rica en oxígeno (Andrew Czaja)

 

Sólo conocemos un ejemplo en el que la materia se ha convertido en lo que llamamos vida, nuestro planeta se ha convertido en un enorme laboratorio donde a lo largo de 4.600 millones de años han interaccionado sustancias orgánicas, fuentes de calor, ecosistemas favorables para permitir el inicio de ciertas reacciones químicas, temperaturas no demasiado extremas, protección contra letales radiaciones provenientes de nuestra estrella,… miles de factores que han permitido la aparición y evolución de lo que conocemos como vida, miles…

Hasta ahora la vida ha tenido un solo génesis, un solo inicio, lo que no proviene de LUCA (Last Universal Common Antecesor) nos es totalmente desconocido. Necesitamos carbono, necesitamos agua, nuestra información se transmite a lo largo de generaciones a través de nuestro ADN, mucha radiación nos mata, poca gravedad también, necesitamos oxígeno para respirar y no nos sienta nada bien que sobre nuestras cabezas no exista una atmósfera de presión… ejemplos válidos para nuestra especie, el ser humano (buscar por internet lo que pueden resistir algunos extremófilos y podéis tachar hasta un 80% de lo escrito hasta ahora)

El hecho es que el conocer una sola génesis nos está dificultando (muchísimo) la búsqueda de vida fuera de nuestra atmósfera, tanto que puede que nuestras sondas hayan pasado por encima de ella sin haberse dado ni cuenta (y lo pongo en plural porque puede que haya sucedido más de una vez).

A medida que exploramos el sistema solar vamos viendo lugares donde la vida pudo surgir en un pasado, sitios donde hace millones de años se pudieron dar las condiciones de habitabilidad que tanto buscamos para que algo parecido a un organismo vivo apareciera y tuviese la oportunidad de evolucionar. Pero, ahí no se queda la cosa, a medida que vamos mejorando nuestros instrumentos y aumentando nuestra área de exploración, nos damos cuenta que quizás, solo quizás, haya localizaciones donde la vida exista hoy en día.

Todavía existen discrepancias sobre los experimentos que las sondas Viking realizaron sobre suelo marciano en 1976. Uno de ellos, conocido como experimento LR (Labeled Release), dió positivo para la existencia de metabolismo en las muestras que recolectó. Un segundo experimento no encontró rastro de sustancias orgánicas (fundamentales para la aparición de la vida en nuestro planeta y que años después encontraría Curiosity en el cráter Gale). La NASA interpretó que las sondas no habían encontrado vida, algo que en los últimos años se está poniendo en duda por diversos estudios, quizás la forma de recoger las muestras esterilizó la tierra marciana analizada, quizás las formas de vida que provocaron la metabolización del primer experimento no se basaban en el carbono… 

A la izquierda depósitos de silicatos en el cráter Gusev (Marte), a la derecha depósitos de silicatos en la región chilena de «EL TATIO» (NASA/Spirit/JPL)


 

Hace unos días apareció un estudio de dos geólogos de la Universidad de Arizona. La imagen de la izquierda fue tomada por el rover Spirit en abril de 2007, cerca de un área conocida como «Home Plate» en el cráter Gusev. Spirit encontró multitud de nódulos ricos en silicatos dispersos por toda la zona, algo que indicaba la probable existencia de respiradores hidrotermales en el contexto de un antiguo Marte mucho más húmedo. 

La parte derecha de la foto corresponde con la región conocida como «El Tatio», una región de Chile situada a 4.200 metros de altitud, uno de los lugares en nuestro planeta donde existen fuentes hidrotermales a mayor altura. Aquí la atmósfera es más fina, la cantidad de radiación ultravioleta mayor, las temperaturas más frías, un lugar muy parecido al inhóspito Marte, un lugar donde aparecen nódulos de silicatos parecidos a los del cráter Gusev, depósitos de silicatos producidos por la acción de microbios en el caso terrestre, de origen aún por filiar en el caso marciano. 

Estructura del interior de Europa (NASA/JPL)


Quizás no deberíamos mencionar las enormes masa de agua subterránea repletas de sustancias orgánicas que esperan ser exploradas en las lunas de Europa y Encelado. Nadie sabe en qué se pueden haber transformado las enormes fuerzas de marea provenientes de Júpiter. 

Tampoco sabemos si algún tipo de microorganismo puede haber aprovechado la conjunción de una densa atmósfera rebosando de tolines con enormes mares y ríos de etano y metano que discurren por la superficie de Titán

No tenemos ni idea de lo que puede haber aparecido debajo de la Planicie del Sputnik (el gran corazón de Plutón), donde un enorme océano subterráneo persiste en estado líquido durante miles de millones de años a miles de millones de kilómetros del Sol. 

A la hora de buscar vida no sabemos ni lo que estamos buscando, no lo hacemos con los instrumentos adecuados y ni siquiera lo hacemos en los sitios más adecuados. Además es posible que hayamos pasado por al lado de ella y no nos hayamos dado ni cuenta. 

Así es muy difícil… y luego está el estúpido antropocentrismo, y luego…

Fuente: Seeker Web

Nuevas imágenes en color del sitio donde impactó la sonda Schiaparelli

Sitio de impacto del módulo Schiaparelli (MRO/NASA)


Acaban de llegar nuevas imágenes del sitio donde se estrelló el módulo europeo Schiaparelli

Las imágenes están en alta resolución y a color, han sido tomadas por la sonda Mars Reconnaissance Orbiter (MRO) y confirman lo que ya suponíamos desde hace unas semanas. 

Esta vez las fotos han sido tomadas mirando hacia al oeste y en ellas se observan, con mayor nitidez, unos pequeños puntos brillantes blancos alrededor de la mancha oscura que causó el impacto de la sonda. En las primeras imágenes no se podía saber si era simplemente ruido a la hora de tomar la instantánea, ahora se ve con claridad que son objetos reales, son fragmentos de Schiaparelli

Dentro de la mancha oscura podemos identificar un parche un poco más brillante, sobre la parte situada más al oeste, esa imagen podría ser compatible con la huella que dejó en la superficie marciana la explosión de los tanques de combustible de la sonda. Estos tanques estaban casi llenos cuando se produjo el impacto, recordemos que los retrocohetes solo se encendieron durante tres segundos antes de que un error en el software interpretara que Schiaparelli estaba a punto de tocar suelo. 

Paracaídas del módulo europeo movido por los fuertes vientos marcianos (NASA/MRO)


Casi a 0.9 kilómetros al sur encontramos el paracaídas y el escudo trasero. Si la comparamos con la imagen obtenida el pasado 25 de Octubre vemos que la disposición ha cambiado, los intensos vientos marcianos pueden estar moviendo el paracaídas de Schiaparelli por mucho tiempo. 

Más imágenes irán llegando las próximas semanas, todas darán más luz sobre que falló en el descenso de Schiaparelli, en 2020 toca atravesar de nuevo la fina y traicionera atmósfera marciana, esta vez con una carga mucho más preciada. 

Fuente: http://m.esa.int/Our_Activities/Space_Science/ExoMars/Schiaparelli_crash_site_in_colour

La sonda Mars Reconnaissance Orbiter fotografía el sitio de impacto de la sonda Schiaparelli

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La sonda de la Nasa Mars Reconnaissance Orbiter (MRO) puede haber localizado el sitio de impacto de la malograda nave europea.

Las imágenes muestran un punto brillante que puede ser el paracaidas de la Schiaparelli y luego un punto negro, el lugar de impacto de la sonda después de que los retrocohetes no cumplieran con su cometido de posar suavemente la nave en el suelo marciano.

Estas mismas imágenes estarán en alta resolución para la semana que viene, lo que puede confirmar lo que ya se cree casi con total seguridad.

La sonda pudo caer desde una distancia de 4 kilómetros e impactar a una velocidad de 300 kilómetros por hora, por lo que puede ser que Schiaparelli explotara por el impacto con los tanques llenos de combustible (el no gastado por los retrocohetes)

Habrá que esperar pero estas imágenes confirman el fatal destino que ha sufrido la sonda.

Fuente: Seeker

Opportunity se dirige hacia un barranco excavado por el agua

Posición actual de Opportunity vista desde la órbita, al sur el barranco que quiere investigar en su misión extendida

Acaban de aprobar la misión extendida de un robot que lleva 12 años en la superficie marciana. Opportunity tendrá dos años más para salir del Marathon Valley y dirigirse hacia un destino apasionante, ningún ingenio construido por el hombre se ha acercado jamás al objetivo que le han asignado, un barranco horadado por una sustancia líquida, un «gully» marciano creado hace millones de años por una corriente de agua…

Nadie se explica como Oppy sigue en funcionamiento todavía, ha resistido duros inviernos marcianos resguardándose en pedientes donde pudiera aprovechar al máximo los escasos rayos de sol que alimentan sus instrumentos, ha escapado de peligrosas trampas de arena (su gemelo Spirit yace en una de ellas desde hace muchos años), ha aprovechado los fuertes vientos del planeta rojo para limpiar sus paneles solares del corrosivo y pegajoso polvo rojo que domina Marte, ha sobrevivido al intento del congreso estadounidense de dejar de financiar la misión,… por ahora nada ha podido detener al pequeño explorador…

Tiene sus achaques, su memoria ya no le permite recordar los impresionantes paisajes que ha visitado el día anterior. La memoria flash se resetea cada noche, esto quiere decir que debe mandar a Tierra todos los datos acumulados a lo largo del día, de lo contrario se perderían. 

Vista desde la parte sur del cráter Endeavour (NASA/JPL)

La nueva misión que le han asignado es una de las más importantes desde aquel lejano 7 de julio de 2003 en el que llegó a la parte este del ya legendario cráter Endeavour. 

Por primera vez en la historia de la exploración marciana Oppy se va a dirigir hacia un barranco excavado, con muchas probabilidades, por el agua. Estos barrancos o «gullies» marcianos han sido avistados en diferentes puntos del planeta rojo desde las sondas situadas en órbita, incluso algunos de ellos están activos en la actualidad. 

El barranco está situado a poco menos de un kilómetro de la posición actual del rover, se desliza de oeste a este a lo largo del borde de Endeavour y tiene una longitud de unos dos campos de fútbol. 

El equipo científico quiere saber cómo se han formado estos barrancos, quiere conocer si su formación se debe a escombros y arena, o por el contrario, han sido horadados por enormes corrientes de agua, agua que fluía por la superficie hace millones de años o que, mezclada con sales y otras sustancias, brota del subsuelo en otras localizaciones en la actualidad. 


Opportunity quiere pasearse por el lecho fluvial de un barranco, su ambición no tiene límites, es la sonda que más distancia ha recorrido fuera de la Tierra, es un superviviente…

Fuente: Nasa news

Actualización: esto es lo que mandaba Oppy hace escasamente 10 horas.